"Cada pequeño logro es el motor para seguir adelante"
Dra. María José Arrúa - Jefa de Neonatología
Organizado con la funcionalidad de una terapia intermedia el servicio de Neonatología del Hospital de Alta Complejidad Cuenca Alta SAMIC, tiene una capacidad de 10 unidades de internación, de baja, media y alta complejidad.
De acuerdo a datos estadísticos dentro de los nacimientos existe un 14 por ciento de pacientes que presentan diferentes patologías que pueden ser diagnosticadas previo al embarazo o luego del nacimiento, y de ellos un 8 por ciento nacen antes de término.
“Es una gran satisfacción trabajar con los más pequeños, su fragilidad y su necesidad intensa de cuidados nos humaniza y nos deja a cargo una responsabilidad inmensa. Cada pequeño logro que ellos alcanzan es una caricia a nuestra alma y el motor para seguir adelante”, relata emocionada la doctora María José Arrúa, jefa de Neonatología del HCAS.
“Mi primer bebé fue prematuro y por suerte tuve una experiencia muy positiva en su evolución. Para poder atender a estos pacientes se requiere de Unidades Neonatales, de diferente complejidad, siendo las características de este servicio de complejidad intermedia en esta etapa inicial de apertura”, dijo la profesional.
El Hospital en una primera etapa dispone de una infraestructura de instrumental, laboratorio, y edilicia, acorde a esta definición, pero delimitando dicha prestación en concordancia con el servicio de maternidad, a todos aquellos pacientes recién nacidos o embarazadas de 32 semanas, o más, de edad gestacional.
La doctora Arrúa precisó que la atención en estos casos “involucran en su gran mayoría patologías del embarazo tales como gestosis materna, diabetes, prematuros mayor de 32 semanas, restricción de crecimiento, mal progreso de peso, infecciones con natales, distres respiratorio, hiperbilirrubinemia, entre otras y pacientes contra referidos de hospitales de alta complejidad que estén en periodo de recuperación”.
Para el logro de una atención de calidad también se tiene en cuenta la capacitación del recurso humano del área sobre los diferentes procedimientos que se efectúan para llevar a cabo la realización de los estudios y prácticas priorizando la obtención del diagnóstico de la enfermedad y la calidad en la atención del paciente.
En este sentido se le da un enfoque especial al desarrollo de enfermería, punto central del servicio, planteando la capacitación continua y jerarquizada del plantel especializado con el propósito de contar con cantidad y calidad de dicho recurso humano.
“Otra de las características del servicio –destacó Arrúa- es que comparte los criterios de maternidad segura y centrada en la familia por lo que los padres tienen un ingreso irrestricto que permite el contacto permanente con su bebé, y en el caso los abuelos pueden hacerlo el fin de semana con horarios preestablecidos”.
Con respecto a las proyecciones para el área, la doctora señaló que “se está trabajando en la incorporación de interconsultores en especialidades como oftalmología, neurología, cardiología”.
Si bien al momento del alta interviene el servicio de Admisión del HCAS que participa en el seguimiento con el establecimiento sanitario local a través de sistema de referencia y contrareferencia, se está evaluando la incorporación desde el Hospital de un consultorio de seguimiento de alto riesgo que permitirá, entre los 30 y 60 días, de un mayor control en la evolución de los bebés egresados.
El servicio de Neonatología depende de la Dirección Médica del HCAS y está integrado por una jefatura de servicio, coordinación médica, médicos de guardia y sector de enfermería, totalizando una dotación de 35 profesionales.
“Mi gran compromiso es intentar, más allá de lo asistencial, que las familias transcurran este período crítico acompañados y sostenidos”, enfatizó Arrúa.
